domingo, 27 de diciembre de 2009

Dolce Stil Nuovo


Il Dolce Stil Nuovo


Es la expresión más alta en poesía amorosa, tanto por los resultados poéticos como por la exquisitez del lenguaje, su coherencia y la complejidad y profundidad de los temas espirituales e ideales.
En Bolonia, que tenía la Universidad más importante de Italia, la concepción espiritual y moral del amor toma una consistencia muy importante hasta el punto que se transforma en el centro de la actividad poética de los nuevos poetas florentinos: Fidelli d'amore / stilnovistas (encabezados por Dante).
GUIDO GUINIZZELLI:
Fue el iniciador de este movimiento. Era un poeta boloñés que además era juez y asesor del Ayuntamiento de Bolonia, era gibelino y tuvo que exiliarse. Murió en el exilio. Su Canción bando incluye los temas del stil nuovo.
-Al cor gentil rempaira sempre amore: esta poesía constituye el programa de su poética, por lo cual, los stilnovistas lo reconocen y lo hacen suyo. Dante lo considera el iniciador del stil nuovo
Destaca la concepción del amor: el amor está unido a la gentileza de corazón de forma que el amor sólo puede estar en un corazón gentil (virtuoso, generoso y noble). Por ello, es absurdo que un corazón gentil no acepte amor y no ame.
-Para los stilnovistas el amor no es una pasión ciega, sensual, sino un sentimiento que eleva al poeta hasta su unión con Dios, siempre a través de la mujer, que es tan bella como su virtud, y que aparece ante el enamorado como una criatura angelical.
La relación amorosa en el stil nuovo no se desarrolla en los términos de la relación conyugal o física, como sucedía con los primeros poetas provenzales y sicilianos. Rechazan el deseo sexual. Aspiran a una unión espiritual y sólo están satisfechos con sentir ese sentimiento amoroso. Sublimación de la pasión amorosa.
Toda esta idea está ligada al espiritualismo y la religiosidad de la época y, además, tiene mucho que ver con la necesidad de otorgar al amor una dignidad legal y religiosa, convirtiéndolo en un ascenso hacia la perfección moral y hacia Dios.
Así pues, toda esta tensión espiritual y poética sirve para expresar el refinamiento intelectual, moral y artístico de un grupo de hombres cultos que dentro del marco social y cultural de la ciudad, aspiraban a un ennoblecimiento, a una distinción situada por encima de las clases sociales y que marcaba a una nueva aristocracia espiritual de la cultura, de la literatura en particular y de la nueva organización ciudadana.
En este contexto, la poesía se convierte en un medio de polémica social en contra de la vieja aristocracia y de la nueva burguesía. Mientras los stilnovistas se consideran a sí mismos un ideal de nobleza cultural y espiritual que incluso tiene influencia en la organización y en la vida cotidiana (a pesar de desarrollarse dentro de un círculo de literatos). Vemos, por tanto, como su literatura obtiene una gran dignidad en cuanto que expresa las exigencias de su tiempo y, además, se adhiere con muchísima fuerza a todo este movimiento civil y cultural. A pesar de todo, los stilnovistas no hablan de política, pues tan solo se centran en temas amorosos. Ahora bien, en estos temas hacen confluir, al mismo tiempo, todas las exigencias espirituales y morales para el ennoblecimiento de su clase, la nueva clase dirigente ciudadana.
La novedad de estos poetas no solo reside en los temas, sino también en el lenguaje, en el estilo, pues es el resultado de una perfecta coherencia entre espontaneidad y elaboración técnica. Todo ello con una minuciosa selección de la expresión verbal, es decir, todo lo que parece espontáneo se debe en realidad a un trabajado estudio.
En este sentido, la poesía de Guido Guinizzelli ya representaba una muestra de una capacidad expresiva muy refinada y una complejidad de lenguaje que serviría de base al grupo stilnovista para llegar, con el tiempo, a una mayor elaboración poética.
GUIDO CAVALCANTI:
Nació en el seno de una familia rica y poderosa de la parte de Güelfa Blank, en Florencia (1250 aprox.). Al igual que su gran amigo Dante, participó de una manera muy activa en la vida política de la ciudad, llegando a formar parte, incluso, del Consejo General de Florencia. En 1300, Dante se vio obligado a exiliarlo debido a la tensión reinante entre güelfos blancos y negros, que se veía aún más agravada por la presencia de personajes tan extremistas como Cavalcanti. Al poco tiempo, fue reclamado de su exilio para morir, definitivamente, en su ciudad natal.
Era una persona muy particular. Llevaba una vida más bien tumultuosa, basada en unas tendencias entre heréticas y ateístas. Poseía una naturaleza melancólica y meditativa, una visión de la vida dramática y angustiosa, hecho que se proyectaba sobre su poesía de una manera dual: por una parte, exalta la belleza de la mujer y alaba el amor stilnovista como ideal para alcanzar esa superioridad intelectual; por otra parte, siente el amor como una fuerza irracional, negativa y casi demoníaca que destruye al enamorado. Así pues, excluye la posibilidad de un amor ideal. Para él tan solo existe el amor sensual y terrenal, capaz de dar muchas penas al poeta y de consecuencias funestas.
Su estilo es también muy diverso:
Elimina todas las metáforas con el mundo de la naturaleza.
Elimina las metáforas que corresponden a la belleza de la mujer (su mujer es una mujer sin rostro, sin colores, en un espacio indeterminado, una atmósfera irreal).
CINO DA PISTOIA:
Nació en Pistoia (Florencia) en 1270. Muy preparado culturalmente, estudió Derecho en la Universidad de Bolonia y realizó múltiples viajes. En 1300 es exiliado de su ciudad junto con muchos otros güelfos negros. En su regreso en 1306 ejerció como juez y como profesor de Derecho de la Universidad de Siena. Ya en 1332 vuelve a su ciudad natal donde muere a principios de 1334.
Su fama proviene tanto de su tarea como jurista como de sus composiciones poéticas en las que canta a una dama llamada Selvaggia.
Sus poemas son de gran importancia puesto que con ellos concluye el Stil Nuovo al mismo tiempo que se abre el camino petrarquista. Su poesía es más realista. Se interesa mucho por el estudio psicológico; de ahí el carácter autobigráfico de muchas de sus composiciones. Transmite además sentimientos muy vivos. Todo es mucho más realista que en el stil nuovo.
- Por tanto, podemos concluir con esto último que el Stil Nuovo cuenta con tres figuras determinantes que marcan claramente su evolución: Guido Cavalcanti, Dante Alighieri y Cino di Pastoia.
DANTE ALIGHIERI:
Es la figura más representativa del Stil Nuovo. Nació en Florencia en 1265. Perteneció a una familia de la pequeña nobleza que era simpatizante del partido de los grandes y, por eso, contraria a las leyes autonobiliarias del pueblo. Estudió las artes del “Trivium” (gramática, dialéctica y retórica) y del “Quadrivium” (aritmética, geometría, astronomía y música). De joven tuvo una vida despreocupada. Su familia lo compromete a los 12 años con Gemma Donatti y se casa con ella a los 20. Tiene 3 o 4 hijos.
Dante era güelfo blanco. En 1295 sale promulgada una ley por la que se intentaba excluir a los nobles de los cargos públicos, sólo se podía optar a ellos perteneciendo a un gremio y tan solo se podía inscribir un noble por cada gremio. Dante se inscribe en el gremio de los médicos. A partir de este momento empieza su vida política, momento en el que el país sufre una fuerte crisis: se dividen los güelfos blancos y los negros.
Dante se acerca a los güelfos blancos ya que son menos extremistas y defendían la independencia de Florencia. Dentro de este grupo intentó llevar a cabo una política equilibrada y una política de defensa de autonomía de la ciudad de Florencia con respecto a las pretensiones del Papa. Ocupó importantes cargos de la ciudad: formó parte de los Cien, del Consejo del capitán del pueblo y del Consejo de elecciones a prior (que era la autoridad máxima de la ciudad de Florencia). En 1300, año en el que se hicieron muy importantes las relaciones de Florencia con el Papa, fue elegido prior.
En 1301, Dante ya no era prior pero seguía ocupando cargos importantes. En este año, el Papa hace llegar a Italia a Carlo de Salois, hermano del Rey francés, para someter Florencia.
Los florentinos se asustan mucho y envía embajadores al Vaticano para salvar la ciudad del
ejército francés. Envían a Dante y a dos más. El Papa consigue disuadirles, pero se da cuenta de que Dante era muy inteligente y le ordena quedarse en el Vaticano. Cuando Dante ya se puede marchar, Carlo ya había ocupado Florencia y ya se había aliado con los güelfos negros. Empieza una persecución contra los güelfos blancos. Dante está de viaje regresando a Florencia pero decide no regresar.
En 1302 se hace una sentencia en contra de Dante, expulsándolo de los cargos públicos que ocupaba, obligándole a pagar una multa y además tenía que exiliarse durante dos años y le quitan todos sus bienes. En marzo de 1302 se le condena a ser quemado vivo.
A partir de la segunda condena, Dante se alía con los güelfos blancos en el exilio, que se habían aliado con los gibelinos también exiliados. En 1304 se enfrentan a los güelfos negros y sufren una derrota que Dante interpreta como consecuencia de una mala organización de los jefes de esa oposición. Por ello rompe toda relación con este grupo y a partir de este momento comienza su vida de exiliado refugiándose en diversas Cortes del centro y norte de Italia. Este hecho constituye uno de los momentos más amargos de su vida. Esto se refleja en los temas de la Divina Comedia, que es la obra que escribe en el exilio.
Las etapas del exilio son numerosas. Viajó mucho: París (la Sorbona) y Milán, donde conoce a Enrique VII, que pretende imponer la paz. Dante se ilusiona y se adhiere a la empresa pacificadora del Emperador, pero este muere y Dante vuelve a desilusionarse. Se suman otras sentencias en contra suya. Estuvo también en Verona y Rábena, donde muere en 1321.
Obras de Dante
Se conoce como Rimas a un conjunto de obras juveniles de Dante escritas alrededor de 1283. Constituyen el primer documento de la formación cultural y de su formación como poeta. Canta a varias mujeres y refleja el aprendizaje de un artista que ya da muestras de gran inspiración. Continúa el estilo poético de su tiempo.
En un principio escribe poesías de carácter guittoniano. Después continúa con el estilo de los poetas sicilianos, con las poesías de tipo cortés muy musicales y refinadas y, finalmente, con una clara adhesión a los temas y composiciones del dolce stil nuovo.
Dentro del stil nuovo hace poesías dulces y suaves, al estilo de Guido Guinizzelli, pero también imita mucho los temas dramáticos de Cavalcanti.
-La vita nova: Contiene algunas de estas composiciones juveniles, sobretodo las dedicadas a Beatrice. Es la mujer que inspira esta obra y luego aparecerá en la Divina Comedia, en el Paraíso. “Beatrice” significa “la que da la felicidad”. Han identificado a Beatrice con una mujer real, llamada Bice, que murió en 1290, a los 24 años. Dante compone esta obra entre 1292 y 1293.
Es una obra en la que se alterna prosa y poesía. Hay 42 capítulos y 31 poemas. Hace una especie de diario literario de su amor hacia Beatrice. La prosa a veces ayuda para contar los relatos y también para comentar las poesías. Narra desde su primer enamoramiento hacia Beatrice, todo el proceso, los sentimientos, como intenta disimular cantando a otras damas (“mujeres pantalla”) y como cae enfermo y tiene una visión en la que ella muere. Cuando se recupera, ella ha muerto realmente. Tiene mucha simbología. Nombra a los “fidelli d'amore”. Es una obra muy medieval. Dante tiene muchas visiones que escribe en la obra. Cuando acaba la obra, empieza a tontear con otra dama: “la filosofía”.
Novedades de La vita nova:
• Primera vez que se habla de amor en prosa
• Mezcla poesía y prosa
• La prosa es en lengua vulgar
• Se produce una superación del stil nuovo: se conforma sólo con su propio sentimiento para que le dé felicidad.
Cuando acabó la Vita Nova, Dante se dedicó a una vida disipada. Se interesa por la política y por ampliar sus conocimientos culturales (filosofía, literatura, teología) y aumenta su producción poética con nuevas poesías inspiradas en nuevos temas y experiencias. Empieza a innovar: lleva a cabo una “tenzone” (género típico de la Edad Media que era una disputa literaria de tipo jocoso): Tenzone con Forese Donati es ficticia. Dante escribe tres sonetos y Forese tres más. Cada uno lleva a cabo una disputa según la técnica medieval del reproche y se escriben acusaciones recíprocamente.
Estas composiciones son el resultado de la poesía jocoso-realista típica de la época y, por lo tanto, es un estilo propio de la literatura jocosa.
-Rime Petrose: Completamente distintas. Son un conjunto de poesías compuestas para una “mujer piedra” (hostil y rígida ante la pasión del poeta). Está compuesta por dos canciones (una sextina y una sextina doble). Dante retoma una técnica bastante novedosa típica de los últimos poetas provenzales: TROBAR CLOUS (son composiciones herméticas con un mensaje poco claro. Dante se basa en formas métricas inusuales, un lenguaje áspero y unas rimas muy complicadas, todo ello para hablar del amor no correspondido.
-Tre donne intorno al cor (Canción del exilio): Es la rima más elevada de todas las que escribe durante el exilio. Habla de su situación de exiliado y exalta el exilio como prueba de su grandeza moral. Esto lo acerca a tres mujeres simbólicas (justicia, derecho natural, derecho positivo).
En esta composición, Dante exalta la dignidad humana y su soledad y, además, es consciente de estar cerca de las virtudes y de los valores morales y civiles a causa de la injusticia de los demás. Se acerca de nuevo al estilo stilnovista pero con un lenguaje más vigoroso que lo acerca al estilo que determinará la Divina Comedia.
Entre 1304 y 1307 Dante trabaja en dos tratados en los que pretende organizar sus experiencias políticas y culturales precedentes desde la muerte de Beatrice.
-Il convivio es el primer tratado que debía constar de 15 libros pero quedó interrumpido en el cuarto. En esta obra, Dante expresa su fe en el poder de la razón y de la filosofía con la intención de divulgar todos los principios fundamentales a aquellos que no conocían el latín. Para ello, escribe en prosa y en lengua vulgar, que es ya muy refinada y elaborada. Es importante por su deseo divulgativo. Al mismo tiempo, realiza una defensa muy enérgica sobre la lengua vulgar italiana que ya es apta para la prosa y para la expresión y difusión científica.
Los temas que trata son: la defensa de la lengua vulgar, discusión sobre la felicidad (primer tratado); inmortalidad del alma (segundo trat.); alabanza de la sabiduría porque acerca el hombre a Dios (tercer trat.); y cuestiones sociales y políticas (la nobleza depende de la virtud no de la herencia) y define como debe ser la autoridad imperial.
Por lo tanto, Il convivio es el resultado de un deseo enciclopédico típico de la cultura del siglo XIII, sólo que en esta obra se produce un entusiasmo intelectual mucho más intenso, hay una superioridad estilística y todo esto hace que sea el punto de partida de la prosa en lengua vulgar.
-De vulgari elocuentia es el segundo tratado. Está escrito en latín puesto que iba dirigido a un público restringido (hombres cultos). Escrito sobre 1304. Es también una obra incompleta pues el proyecto inicial era de cuatro libros pero se para en el capítulo 14 del segundo libro. Es una reflexión sobre la lengua vulgar y establece la oposición entre lengua natural y lengua artificial con respecto a las lenguas habladas en Italia.
Para Dante, la lengua vulgar es más noble porque es natural / materna. También afirma que tiene un carácter universal y por oposición coloca al latín porque es una lengua aprendida y reservada para un grupo reducido de hombres cultos. Cae en el error de pensar que la lengua natural es anterior al latín, que cree que es una lengua artificial. Tenía el deseo de desarrollar en esta obra la utilización que debía tener cada lengua, pero sólo escribió sobre el lenguaje más apto para la poesía.
En este tratado aborda cuestiones de carácter lingüístico señalando el grupo de lenguas románicas, clasificando los dialectos italianos. Además, propone la utilización de una lengua nacional única, superior a los dialectos, que se hubiese formado en base a las reglas de los literatos y que debía ser una lengua áurea y curial (de la Corte) para utilizarse en una hipotética Corte Italiana.
Con esta obra, Dante inaugura un tema que se convierte en debate: QUESTIONE DELLA LINGUA (se va a reavivar en el siglo XVI hasta el XIX).
-La Monarchia es la obra donde aparecen las ideas políticas de Dante. Es probable que fuera escrita tras el fracaso de la misión de Enrique VII, aunque estudios más recientes la sitúan entre 1312 y 1313. Es una obra completa, en latín y compuesta por tres libros:
Dante afirma que la finalidad de la sociedad humana es el desarrollo del intelecto. Para que esto ocurra tiene que haber paz y justicia y estas sólo pueden estar aseguradas por el Emperador. La monarquía universal en la Tierra reproduce la unidad del Universo dirigido por Dios. Al igual que existe un único principio motor en el Universo (Dios), único tiene que ser el soberano en la Tierra (Emperador). Así se asegura la justicia, concordia y libertad. El Emperador tiene que establecer unas leyes y el derecho único.
Dante realiza unas complicadas comparaciones para decir que el pueblo romano es el elegido por Dios para tener la soberanía en la Tierra, así que sigue siendo el encargado de llevar la justicia terrenal a cabo.
Se centra en la relación entre el Imperio y la Iglesia. Los partidarios del Papa dicen que este era el representante de Dios en la Tierra y realizan la “comparación del sol y la luna” (de la misma forma que la luna recibe la luz del sol, el emperador recibe su autoridad del Papa, que la recibe directamente de Dios). El Papa coronaba al emperador (“Donación de Constantino”) y de este hecho se deriva la creencia del poder del Papa sobre el emperador.
Dante invalida la “teoría del sol y de la luna” y la “donación de Constantino”, y propone dos guías necesarias para la sociedad humana: En el campo espiritual la guía es el Papa; el emperador tiene que ser la guía de la vida terrenal para asegurar la felicidad terrenal. Con esta distinción Dante se acerca a una rebelión teológica de las doctrinas de la Iglesia. Al mismo tiempo adopta una postura de profeta y de teorizador de una verdad que luego desarrollará más en La Divina Comedia.
- Cartas poéticas: son 13 cartas en latín y son importantes porque explican sus ideas políticas. Muchas están escritas con motivo de la misión pacificadora de Enrique VII. Están dirigidas a los poderosos de Italia, a los florentinos, al emperador y a los cardenales italianos (para pedirles que escogieran un Papa que devolviera la curia a Roma, que estaba en Aviñón). Hay una carta más personal dirigida a un amigo en la que habla del exilio, de la nostalgia hacia su ciudad y donde manifiesta el rechazo de volver humillándose en público. Aquí aparece un lenguaje áureo y todos los sentimientos del exiliado nostálgico, pero con una unión de sentimientos privados y civiles expresados indisolublemente y que son la expresión de su dignidad y de su misión de justicia.
La carta 13 va dirigida a otro amigo suyo, mecenas, llamado Cangrande della Scala, que era el señor feudal de Verona. Habla de La Divina Comedia, de su significado y de cómo debe leerse. Es un documento sobre la creación de esta gran obra.
-En los últimos años de su vida, escribió dos obras menores que son dos églogas en latín que tratan de nuevo la defensa de la lengua vulgar. También escribe un tratado científico.
- La Divina Comedia: Sólo la llamó La Commedia y le puso este título en relación con el estilo, porque decía que era una composición que empezaba mal pero que acababa bien, y también por el estilo humilde en oposición al elevado de la tragedia. El adjetivo de “Divina” es posterior. El primero que se lo puso fue Boccacio. Aparece publicado por primera vez con las dos palabras en 1555, en una edición en Venecia de Ludovico Dolce.
Su composición duró unos 15 años, hasta casi su muerte. No existe una datación concreta pero se opina que El Infierno fue escrito entre 1304 y 1308 y divulgado en 1314, El Purgatorio fue escrito entre 1308 y 1312 y divulgado en 1315, y El Paraíso fue escrito entre 1316 y 1321 y divulgado póstumamente por sus hijos.
Dante encontró muchas dificultades entre las autoridades religiosas y las órdenes mendicales porque se dudaba de la ortodoxia de la composición y del propio Dante (coge elementos islámicos para elaborar los mundos del más allá), pero encuentra una difusión oral enorme, y más tarde también escrita.
La Divina Comedia se divide en tres partes, cada una de ellas llamada “cántiga” y cada una dedicada a uno de los mundos del más allá (Infierno, Purgatorio y Paraíso). Cada cántiga consta de 33 cantos, excepto El Infierno que tiene un proemio y que, por lo tanto, suma 34 cantos. En total hay 100 cantos. Todo está escrito en tercetos encadenados. Es la primera vez que se utiliza este tipo de estrofa (“tercetos dantescos”). Está inspirada en el supremo criterio de la justicia divina, que es la que premia o castiga en el más allá según las acciones realizadas en la Tierra.
En La Divina Comedia se narra el viaje de Dante a través de los tres mundos. Dante es el símbolo de la progresiva experiencia de la purificación del alma. Estos tres mundos se presentan como una gran construcción arquitectónica en base al sistema ptolemaico y aristotélico.
Argumento básico: el Viernes Santo de 1300 (año de jubileo), Dante se encuentra en la puerta del Infierno. Esto le sucede porque murió Beatrice, que era la mujer que lo había llevado por el camino de la virtud, y ahora se siente perdido. Se encuentra en la selva del pecado y se le aparecen tres fieras: “lujuria”, “avaricia” y “soberbia”. En este momento se le aparece Virgilio enviado por Beatrice para que le ayude. Virgilio simboliza la razón humana, mientras que Beatrice simboliza la teología. Virgilio ayuda a Dante a liberarse de las tres fieras y lo introduce por la puerta del Infierno, dando inicio al viaje de siete días. Virgilio guía a Dante también por el Purgatorio, pero no en el Paraíso, puesto que no está bautizado. Aquí es sustituido por Beatrice, que guía a Dante hasta que el viaje concluye con la visión de Dios.
El Infierno:
Aparece descrito como una profunda cavidad con forma de cono invertido. Se encuentra abierto bajo tierra desde Jerusalén hasta el centro de la Tierra, que es donde vive Lucifer. Se divide en nueve círculos descendentes y en cada uno de ellos se castiga un pecado según un criterio de gravedad progresiva. Además sigue una subdivisión de tres clases.
• “Anti-infierno”: es la antesala del Infierno y se encuentra en el primer círculo. Aquí están los indolentes y perezosos.
• “Limbo”: donde están todos los que murieron sin ser bautizados. Su pena es que no pueden ver a Dios.
• Pecados más graves Incontinentes: (desde el segundo hasta el quinto círculo) son los que no supieron contenerse de usar todas las cosas que Dios concede al hombre para conservar la vida. Son los que ofenden a Dios (golosos, avaros, pródigos e iracundos). En el sexto círculo se encuentran los heréticos. Violentos: (séptimo círculo) se dividen en violentos contra el prójimo (homicidas), contra sí mismos (suicidas) y contra Dios (blasfemos y sodomitas). Fraudulentos:
(círculos ocho y nueve) son los que cometieron el pecado más grave para Dante puesto que, según él, el fraude es fruto de la inteligencia usada para hacer daño a otros. Se dividen en los que usan la inteligencia contra los que no se fían (seductores, aduladores, adivinos, hipócritas, ladrones, consejeros falsos y celestinos) y los que la usan contra los que se fían: traidores. Estos últimos se encuentran en el río Cocito (parte baje del Infierno) que se divide en cuatro zonas: Caina (traidores a la familia), Antenora (a la patria), Tolome (a los huéspedes) y Giudecca (a los benefactores).
En el centro del Infierno se encuentra Lucifer. Aparece representado como un monstruo de tres cabezas y seis alas de murciélago. Está en el centro del río Cocito y está despedazando continuamente a Brutto, Casio y Judas, los peores pecadores para Dante.
Todos los castigos están penados por la ley de la contraposición (“contrapasso”).
El Purgatorio:
Se encuentra en el hemisferio austral. Aparece representado como una montaña altísima que está sobre una isla del océano en la parte contraria de Jerusalén. El guardián del Purgatorio es Catón el uticense, oponente de Julio César. Es un interprete de la ley y representa el símbolo de la libertad (libertad del pecado). El Purgatorio se divide en cuatro partes:
Playa: aquí llegan las almas que viajan desde el río Tiber.
Anti-purgatorio: es la parte más elevada de la montaña, es transparente y difícil de ascender porque simboliza la dificultad del camino de purificación. Se divide en cuatro partes ascendentes en las que se encuentran los excomulgados, los perezosos para arrepentirse, los que murieron violentamente sin tiempo de arrepentirse y los príncipes que se preocupan más por la política que por su alma. La pena que tienen es esperar un tiempo antes de entrar en el Purgatorio. Las almas se van purificando, van ascendiendo incluso hasta el Paraíso.
Purgatorio: Guardado por un ángel que interroga a Dante y a Virgilio (confesión). Se divide en tres zonas que se subdividen en siete rellanos en donde las almas se encuentran colocadas con un criterio opuesto al del Infierno (desde los pecado más graves a los más leves). La clasificación de los espíritus Dante la coloca según la teoría del amor y esto corresponde con que el amor puede
ser natural (bueno) o por elección (elegir obrar bien o mal: soberbia, envidia, ira, pereza de religión, mucho amor hacia los bienes terrenales). Cada vez que los espíritus aumentan un estrato se encuentran un ángel que los interroga.
Paraíso terrenal: Se basa en las descripciones bíblicas y clásicas del Edén. Es una llanura situada en la parte superior del Purgatorio, cubierta de mucha vegetación, muy ventilada debido al eterno movimiento de los cielos y además bañada por los ríos Lete y Eunoe. Dante ve una procesión en la que se relatan todos los sucesos de la historia del Imperio, la Iglesia y Florencia, y se baña en los ríos para purificarse y prepararse para ir al Paraíso.
El Paraíso:
Está constituido por nueve cielos concéntricos que rodean la Tierra y mantienen un movimiento constante, por el Empirio (cielo de luz, inmóvil). El movimiento de los cielos está determinado por el deseo de Dios y su velocidad aumenta a medida que se acerca al Empirio. Cada cielo está presidido por inteligencias motrices y se mueven desde el más alto al más bajo. Los cielos son: Luna, Mercurio, Venus, Sol, Marte, Júpiter, Saturno, Estrellas fijas y primer móvil (donde empieza el movimiento rotatorio).
Según la idea explicada en Il Convivio, los primeros tres cielos se corresponden con las artes del Trivium, los cuatro siguientes con las del Quatrivium, el octavo con la física y metafísica, el noveno con la filosofía moral, y el décimo (en el cual se encuentra Dios) con la teología.
Las almas se llaman beatos y no ocupan un lugar fijo porque todos están en los sillones de la “Cándida Rosa” contemplando continuamente el rostro de Dios.
Al final de todo el recorrido, Dante puede contemplar el triunfo de Cristo, de la Virgen, de los Arcángeles y de los Apóstoles (en el cielo de las Estrellas fijas), puede escuchar el canto de los serafines en el noveno cielo y, finalmente, a San Pedro, San Santiago y San Juan sobre la fe, la esperanza y la caridad (las tres virtudes teologales). Después de esto puede llegar al Empirio donde Beatriz lo deja para ocupar su sillón en la “Cándida Rosa”. Ahora lo acompaña San Bernardo. En el Empirio Dante ve por fin la “Cándida Rosa” y puede contemplar la visión de Dios en un momento de éxtasis.
El Paraíso representa la cumbre de la filosofía. La teoría literaria clásica dice que también representa el triunfo de las doctrinas cristianas, y lo prueba por la presencia de numerosos santos importantes en el pensamiento medieval. Toda la cántiga del Paraíso se rige por la absoluta perfección.
* * *

Petrarca - Poesías (selección)



Italia, Arezzo(1304-1374)











Si no es amor, ¿qué esto que yo siento?
mas si no es amor, por Dios, ¿qué cosa y cual?
Si es buena, ¿por qué es áspera y mortal?
si mala, ¿por qué es dulce su tormento?

Si ardo por gusto, ¿por qué me lamento?
Si a mi pesar, ¿qué vale un llanto tal?
Oh, viva muerte, oh deleitoso mal,
¿por qué puedes en mí si no consiento?

Y si consiento, error es quejarme.
Entre contrarios vientos va mi nave
-que en alta mar me encuentro sin gobierno-

tan leve de saber, de error tan grave,
que no sé lo que quiero aconsejarme
y, si tiemblo en verano, ardo en invierno.

SONETO A LAURA

Paz no encuentro ni puedo hacer la guerra,
y ardo y soy hielo; y temo y todo aplazo;
y vuelo sobre el cielo y yazgo en tierra;
y nada aprieto y todo el mundo abrazo.

Quien me tiene en prisión, ni abre ni cierra,
ni me retiene ni me suelta el lazo;
y no me mata Amor ni me deshierra,
ni me quiere ni quita mi embarazo.

Veo sin ojos y sin lengua grito;
y pido ayuda y parecer anhelo;
a otros amo y por mí me siento odiado.

Llorando grito y el dolor transito;
muerte y vida me dan igual desvelo;
por vos estoy, Señora, en este estado.

BENDITO SEA EL AÑO


Bendito sea el año, el punto, el día,
la estación, el lugar, el mes, la hora
y el país, en el cual su encantadora
mirada encadenóse al alma mía.

Bendita la dulcísima porfía
de entregarme a ese amor que en mi alma mora,
y el arco y las saetas, de que ahora
las llagas siento abiertas todavía.

Benditas las palabras con que canto
el nombre de mi amada; y mi tormento,
mis ansias, mis suspiros y mi llanto.

Y benditos mis versos y mi arte
pues la ensalzan, y, en fin, mi pensamiento,
puesto que ella tan sólo lo comparte.

EN LA MUERTE DE LAURA

Sus ojos que canté amorosamente,
su cuerpo hermoso que adoré constante,
y que vivir me hiciera tan distante
de mí mismo, y huyendo de la gente,

Su cabellera de oro reluciente,
la risa de su angélico semblante
que hizo la tierra al cielo semejante,
¡poco polvo son ya que nada siente!

¡Y sin embargo vivo todavía!
A ciegas, sin la lumbre que amé tanto,
surca mi nave la extensión vacía...

Aquí termine mi amoroso canto:
seca la fuente está de mi alegría,
mi lira yace convertida en llanto.

SONETO


Bendecidos el año, el mes, el día
y la estación y el sitio y el instante
y el hermoso país en que delante
de su mirar mi voluntad rendía.

Y bendecida la tenaz porfía
de amor entre mi pecho palpitante,
y el arco y la saeta y la sangrante
herida que en mi corazón se abría.

Bendecida la voz que repitiendo
va por doquier el nombre de mi amada,
suspiros, ansias, lágrimas vertiendo.

Y bendecido todo cuanto escribe
la mente que al loarla consagrada
en Ella y sólo para Ella vive.

Ver esta página:
http://www.filosofia.tk/versoados/poemas_nacion.htm 

Borges: Nueve Ensayos Dantescos (resumen)




NUEVE ESTUDIOS DANTESCOS (Jorge Luis Borges)


CANTOS:

INFIERNO: I – IV – XXVI
PURGATORIO: I – XXXI
PARAÍSO: X – XXXI

1. La grandiosidad de Dante:

Para Jorge Luis Borges, más que la grandiosidad del Poema o lo universal o lo sublime, son otros los caracteres más deleitables de la Comedia.

En primer lugar, la variada y afortunada invención de rasgos precisos que, con comparaciones pormenorizadas, resalta lo sublime y grandioso, y no en la hipérbole de otros grandes. Dante se prohíbe ese error; en su libro no hay palabra injustificada.

En segundo lugar están los rasgos psicológicos . Pero Dante no exagera los procesos mentales (psicológicos), los deja vislumbrar en una intención o en un gesto.

2. Cosmovisión de Dante:

El universo de Dante está construido sobre la astronomía ptolomaica y la teología cristiana.

La Tierra es una esfera inmóvil. En el centro del hemisferio boreal está la montaña de Sión. A noventa grados de la montaña, al oriente, muere el río Ganges. Al poniente, nace el río Ebro. El hemisferio austral es de agua, y está prohibido a los hombre. En el centro hay una montaña antípoda de Sión, la montaña del Purgatorio. Los dos ríos y las dos montañas forman una cruz. Bajo la montaña de Sión se abre un cono invertido hasta el centro de la Tierra: el Infierno, dividido en círculos decrecientes. Los círculos son nueve y su topografía es ruinosa. En el ápice está Lucifer, “el gusano que orada el mundo”. La base del purgatorio con el fondo del Infierno están comunicados por el río Leteo. En torno a la Tierra giran nueve círculos concéntricos. Los siete primeros son los cielos planetarios; el octavo, el cielo de las estrellas fijas; el noveno, el cielo cristalino o Primer Móvil. A éste lo rodea el empíreo donde la Rosa de los justos se abre en torno a un punto, que es Dios. Los coros de la Rosa son nueve.

Con esto Dante no se propuso establecer la verdadera topografía del otro mundo. Así lo declaró él mismo: “El sujeto de su Comedia es el estado de las almas después de la muerte alegóricamente”. El Infierno corresponde al vicio; el Purgatorio, al pasaje del vicio a la virtud, y el Paraíso, a los hombres perfectos.

La Divina Comedia es panteísta en su aplicación al poeta y a su obra: el poeta es cada uno de los hombres de su mundo ficticio, es cada soplo y cada pormenor. Una de sus tareas es ocultar o disimular esa omnipresencia. Dante está obligado por el carácter de su poema a adjudicar la gloria o la perdición. La justicia, que emitía los fallos era él mismo. Para que el lector no advirtiera esto se incluyó como personaje de la Comedia e hizo que sus reacciones no coincidieran con las decisiones divinas.

El Infierno de Dante no es un lugar atroz, es un lugar en el que ocurren hechos atroces.

* * *

LOS ESTUDIOS DANTESCOS

INFIERNO IV: El castillo de los paganos.

Al principio de la Comedia, ésta se presenta como un sueño, y Dante no es más que el sujeto de ese sueño . El sueño es la metáfora de la ofuscación (confusión) del alma pecadora. La loba que le cierra el camino hace que muchos vivan tristes. Esto no es por la simple visión de la fiera.

Luego Dante se encuentra con Virgilio, quien palidece al entrar en el primer círculo. Dante cree que es por temor. Virgilio explica que es por lástima, ya que él mismo es también un réprobo. Dante, para mostrar su piedad, prodiga títulos reverenciales . Virgilio le explica que están en el Infierno de los que murieron antes de proclamada la fe de Cristo. Lo saludan cuatro sombras: Homero, Horacio, Ovidio y Lucano. Los cuatro honran a Dante como a un igual. Lo conducen a un castillo siete veces rodeado por altos muros (las siete artes liberales). Los habitantes del castillo son gente de mucha autoridad. Viven en un anhelo sin esperanzas. No padecen dolor, pero Dios los excluye.

Hospedar en ese lugar a los paganos virtuosos fue invención de Dante, pues él no podía salvar a sus héroes y los pensó en un Infierno negativo. Se apiadó de su misterioso destino.

Muchos piensan que a Dante le faltó el vuelo poético que adquirió en los cantos sucesivos. Borges piensa, en cambio, que Homero, Horacio, Ovidio y Lucano son proyecciones de Dante, que se sabía no inferior a esos grandes . Son como él: magistrales en el ejercicio de su arte y, sin embargo, están en el Infierno porque los olvida Beatriz.

INFIERNO XXVI, 99 – 142: El último viaje de Ulises.

Instado por Virgilio, Ulises cuenta cómo fue su último viaje:

El ardor de conocer el mundo lo impulsó a abandonar su familia. Se lanzó al mar abierto. Arribaron a las columnas de Hércules. Navegaron al ocaso y después al Sur, donde vieron las estrellas del hemisferios austral. Cinco meses duró el viaje hasta que divisaron una montaña. Se levantó una tormenta que hundió la nave, y se cerró sobre él y los suyos el mar.

Muchos creen que este relato es una digresión del autor. Sin embargo en la Edad Media se negaba que los seres humanos pudieran llegar a la parte inferior de la Tierra. El viaje, por tanto, sería sacrílego. El viaje acaba en una catástrofe, que no es mero destino de hombre de mar, sino la palabra de Dios.

El recorrido que hizo Ulises es el mismo que hizo Dante al entrar al Infierno. Pero Ulises quiso alcanzar la montaña del Purgatorio fiado en sus propias fuerzas, desafiando los límites decretado a lo que puede el hombre. Dante, nuevo Ulises, la pisará como un vencedor, ceñido de humildad, y no lo guiará la soberbia sino la razón, iluminada por la gracia.

Equiparar el viaje de Ulises con el viaje de Dante implica un error: el viaje de Ulises es el viaje de Ulises, porque Ulises es el sujeto de quien se predica esa acción. Pero la empresa de Dante no es el viaje de Dante, sino la ejecución de su libro.

Dante era teólogo. Muchas veces la escritura de la Comedia le habrá parecido ardua, arriesgada y fatal, como el último viaje de Ulises.

Su actitud era osada y podía esconder una culpa. Equiparaba a Beatriz a la Virgen María y a Jesús. Se anticipaba a los dictámenes del Juicio Final. Había juzgado y condenado las almas de papas y había salvado al averroísta Siger. Su obra podía acarrearle la ira de sus enemigos… De allí el temor de correr el mismo fin de Ulises.

PARAÍSO X: Beda, una anticipación a la Comedia.

En el canto X Dante refiere que vio en la esfera del sol una corona formada por doce espíritus. El séptimo círculo corresponde a Beda el venerable, diácono inglés del monasterio de Farrow del siglo VIII.

Según Beda, Fursa fue un asceta irlandés que había convertido a muchos sajones. Cuando sufría una enfermedad fue arrebatado por los ángeles en espíritu y subió al cielo, donde vio casas maravillosas.

Otra visión fue la de un hombre de Normandía, llamado Drychthelm. Éste, al cabo de una enfermedad, murió y resucitó al amanecer. Drychthelm le dijo a su mujer que viviría piadosamente de ahora en más. Repartió sus bienes entre su familia y una parte se la dio a los pobres. Luego se retiró a un monasterio donde hizo una vida rigurosa. Contaba que un ángel lo condujo por un valle profundo y ancho de interminable extensión. A la izquierda había fuego; a la derecha, remolinos y nieve. La tempestad arrojaba una muchedumbre de almas en pena. Pensó que eso era el Infierno, pero el ángel le dijo que no. Luego quedó solo. Vio demonios y espíritus torturados. Finalmente vio venir una estrella. Los demonios huyeron. La estrella era un ángel. Lo condujo hacia el Sur. Se toparon con una enorme muralla. Detrás de esa muralla había una hermosa pradera, poblada de personas vestidas de blanco y felices. Creyó estar en el cielo, pero el ángel le dijo que no. Más allá había una luz resplandeciente y adentro, personas cantando. Cuando creyó que iba a entrar allí, el ángel lo devolvió a su cuerpo y le dijo que si obraba bien llegaría al cielo.

Quizás una tradición oral trajo estos rasgos a Beda el venerable. Quizá esa misma tradición llegó a Dante…

PURGATORIO I, 13: La metáfora de Dante.

“Dulce color de oriental zafiro”. El zafiro es una piedra de color entre celeste y azul, agradable a la vista. Dante sugiere el color del oriente por un zafiro en cuyo nombre está el oriente. Es un juego recíproco, infinito…

PURGATORIO XXX, 49 – 51: Encuentro con Beatriz.

Los veinticuatro ancianos son los veinticuatro libros de viejo testamento.

Los animales con seis alas son los evangelistas o los Evangelios.

Las seis alas son las seis leyes o la difusión de la doctrina en las seis direcciones del espacio.

El carro es la Iglesia universa.

Las dos ruedas son los dos Testamentos o la vida activa y contemplativa o la Justicia y la Piedad.
El grito – león y águila – es Cristo, por la unión del Verbo con la naturaleza humana. Otros dicen que es el Papa: como águila se eleva para recibir las órdenes de Dios, y como león las imparte en la Tierra.

Las mujeres que danzan a la derecha son las virtudes teologales; las que danzan a la izquierda, las cardinales.

La mujer de tres ojos es la Prudencia, que ve lo pasado, lo presente y lo futuro.

Cuando aparece Beatriz, desaparece Virgilio; porque Virgilio es la razón y Beatriz la fe, o porque a la cultura clásica le siguió la cultura cristiana.

A Dante le interesa más la alegoría, el Bien, que la belleza o el arte. Sacrifica la belleza por el amor al bien.

Dante fue despreciado (desairado) por Beatriz. Una vez muerta ella, él pierde toda esperanza terrenal de tenerla. Por eso crea la Comedia, para encontrarla. Pero ella, en eso sueño, es severísima con él. Las imágenes que él ve son más parecidas a una pesadilla que a un sueño feliz. Quizá Dante tuvo envidia de Paolo y de Francesca, unidos para siempre en su infierno…

PARAÍSO XXXI: La última sonrisa de Beatriz.

En la cumbre del monte del Purgatorio, Dante pierde a Virgilio. Asciende ahora con Beatriz por las distintas esferas del cielo. En el empíreo, Beatriz lo abandona. La ve en lo alto, en uno de los círculos de la Rosa: “Así imploré, y aquella, tan lejana como parecía, se sonrió y me miró de nuevo; y después se volvió a la eterna fuente” (Paraíso XXXI, 91-93)t.

La razón, Virgilio, es un instrumento para alcanzar la Fe; la Fe, Beatriz, un instrumento para alcanzar la divinidad. Ambos se pierden, una vez logrado su fin.

Pero Beatriz sonríe a Dante para decirle que su plegaria ha sido aceptada; lo mira para significarle una vez más el amor que le tiene.

Borges sospecha que Dante edificó el mejor libro de que la literatura ha alcanzado para intercalar algunos encuentros con la irrecuperable Beatriz.

El último encuentro es el más doloroso, no por ser último, sino porque sucede en el cielo…

* * *

Mitología Nórdica - Las Eddas


Mitología Nórdica

Los mitos nórdicos se formaron en el Cáucaso y llegaron hasta el Rhin sobreviviendo más tiempo en los países escandinavos, especialmente en Islandia, la tierra del hielo y el fuego.

Etapas del Mito:

En más o en menos los autores reconocen que la formación de los mitos es lenta y atraviesa principalmente tres etapas:

1. La etapa mágica: su comienzo es animista y mágico; los hombres creen ver en los fenómenos naturales y en los fetiches que fabrican, ciertas fuerzas extranaturales. Son como vagas deidades impersonales.

2. La etapa figurativa: durante la misma, esas fuerzas mágicas, ínsitas en las cosas, se separan y adquieren personería. Es el momento en que los dioses toman su nombre propio. La mitología nórdica había llegado a este paso cuando se encontró con el cristianismo.

3. La etapa del panteón: por último esos dioses traban relaciones entre sí y adquieren una función determinada dentro del conjunto mítico. Aquí están ubicados los dioses supremos e inferiores, solares y tectónicos, diurnos y nocturnos, buenos y malos. Por no haber alcanzado esta etapa, la mitología nórdica es desordenada.

Los mitos del norte:

“No se debe negar a la mitología nórdica una trágica grandiosidad y una dinámica tesitura no alcanzada por ninguna otra mitología”

(Bruno Vignola, “Historia de las religiones”).

En la mitología nórdica es dable encontrar mitologemas comunes a otras culturas primitivas.
Algo llama la atención en la mitología germánica, y es la serie de contrarios que narra; casi estamos tentados en llamarla “mitología de las antinomias”, entre las cuales se destaca la guerra como la más grave.

“De la mitología nórdica se puede decir, con Paul Valéry, lo que de la poesía actual, y es que incita más a arrojarse en el corazón de la existencia que a su conocimiento y contemplación”. Y nosotros agregaríamos que ello es así puesto que la poesía actual está bajo la influencia de lo nórdico.
“Tampoco se debe ignorar un hecho importante: en el mundo nórdico, la carencia de personificaciones netas como las del mundo meridional, se basa en el carácter dinámico, fluente, metafórico y hasta cierto punto indeciso de las creencias de dichos pueblos septentrionales” (Cirot).

Génesis del Todo

Dice el mito que en un comienzo sólo existía un gran Abismo Abierto o Ginungagap dentro del cual había una región de hielo y niebla hacia el norte y otras de llamas y fuego hacia el sur (antinomia del hielo y el fuego). Esta oposición puede haber sido sugerida por la misma naturaleza de Islandia (isla ártica con numerosos y enormes geisers).
Agrega el mito que en ese Abismo Abierto vivía un “hombre” llamado Ymir; algo así como un ser primordial que se alimentaba de la leche de una vaca fantástica. No había dios alguno. Los dioses vinieron después de Ymir. Nacen precisamente de éste y son de dos razas diferentes y opuestas: los Anen y los Wanen (antinomia de los dioses).
Son estos dioses los que modelan la tierra firme y en ella forman el Jardín Central o Mittgard. En una playa del Mittgard aparecen un día, un fresno que es un hombre, Ask, y un olmo que es una mujer, Embla, y en ellos comienza la raza humana. Era aquella una época de oro en que no se conocía la guerra.

Tres cosas queremos destacar de este mito:

a. En primer lugar no existe el concepto de “creación a partir de la nada” propia de los cristianos, puesto que antes de ser creada la tierra por los dioses, y a existía el Abismo Abierto, el Hombre y la Vaca, cuya creación y origen no se explica.

b. Las antinomias que hemos señalado son un rasgo característico de los nórdicos y que influirá en la filosofía moderna.

c. El hombre es anterior a los dioses y resulta imposible dejar de percibir en este mito el brote de aquel humanismo absoluto que, en tiempos modernos, exaltará al hombre a la categoría de un dios (ver Nietzsche).

Odín y el Lobo

El supremo Padre de Todos en los países escandinavos es Odín, dios de la guerra que, en los países germanos, se llamó Wotan (la palabra “dios” es de origen ario o indoeuropeo y significa tanto como “Padre del Cielo”. Etimológicamente lo más seguro es que derive de “dievus” que luego de varias transformaciones, llega al griego como “Zeus” y de ahí al latín como “Ju-piter”, y más tarde “Divus”. La palabra semítica que menciona a la divinidad es otra: “Elhoim”).
Wotan tiene un hijo que es Thor. Al final de los tiempos, durante el Ragnarök, Odín se enfrentará con el Lobo, símbolo del mal, y será devorado por éste. Mientras tanto Odín vigila.

Señalaremos dos cosas en este mito:

a. La antinomia entre el bien y el mal, simbolizada entre Odín y el Lobo y la derrota final del bien; ello concuerda ajustadamente con el espíritu ora exaltado ora pesimista de los germanos.
b. El hecho de que Odín no sea dios de la justicia y la armonía, sino de la “guerra” es decir, de los contarios que luchan entre sí; esto se explica por la naturaleza guerrera de los hombres de norte. En cambio en Grecia, Marte, dios de la guerra, estaba subordinado a Zeus, y no era pues, el primero.

Thor y Loki:

Thor es el hijo de Odín y simboliza el trueno armado con su martillo Myölnir que es el rayo. La misión de Thor es nobilísima y consiste en combatir permanentemente a los gigantes de hielo y a los gigantes de fuego, otra simbolización del mal. Con furia arroja Thor a Myölnir, el rayo, contra esos monstruos de las montañas.
Pero su enemigo último y definitivo es Loki, dios de todas las fuerzas del mal, con quien Thor deberá luchar durante el Ragnarök hasta ser vencido por éste. “El mitologema central de la serio arcaica del Edda estuvo constituido por la lucha de Thor contra Loki”.

Y aquí debemos señalar:

a. nuevamente la derrota de las fuerzas del bien por las del mal, lo que otorga a esta mitología una diferencia polar con las ideas de otras culturas.

b. Otra antinomia más.

Valquirias y Nornas:
Las Valquirias son las salvadoras de los guerreros que mueren en combate. Bajo el mando de Odín señalan quiénes han de morir heroicamente; luego los recogen en sus fuertes corceles y los llevan al Walhalla donde, una vez vueltos a la vida, les sirven. “Las Valquirias son una extraña mezcla de belleza y ferocidad, de femineidad y fortaleza, crean un ambiente de misteriosa sensualidad donde se unen la muerte y la vida, y que las hace obsesivamente atrayentes”.

Las Nornas son todo lo contrario, es decir, simbolizan la perversidad. En un comienzo la Edad de Oro estaba fuera del tiempo y, por lo tanto, nadie envejecía (mito de la eterna juventud); como no había tiempo, tampoco había destino pues todo estaba ya cumplido. Pero un día, de la tierra de los gigantes, el Asgard, que está más allá del Mittgard, vinieron las mujeres en número de tres, las Nornas. Con ellas comenzó el tiempo pues representaban el Pasado, el Presente y el Futuro. Ahora los hombres comenzaron a envejecer y hubo para ellos destino, el que era dictado, precisamente, por las Nornas y cuyo cumplimiento era fatal. Con las Mujeres, además, comienza la guerra y concluye la Edad Dorada.

Freya es la diosa del amor voluptuoso, es decir, la Afrodita de los bárbaros y simbolizó el canto a la vida terrena.

Freya es la diosa más hermosa.
Gústanle los cantos de amor;
A ella conviene recurrir
En los asuntos del corazón”

(de la Edda de Snorry)

Las sugerencias que estos mitos provocan podemos resumirlas así:

a. Una nueva antinomia entre las Valquirias que son las salvadoras y las Nornas que son perversas. Y también se desliza aquí el enigma de la vida y la muerte.

b. Las Valquirias, como constante presencia femenina, aumenta en los guerreros su coraje. A su turno los caballeros medievales tendrán siempre presente a su dama (“Las Valquirias resultan para los hombres del norte una necesidad y un elemento de gran valía para excitar el instinto fanático” Cirot).

c. También la antinomia entre las Valquirias y Freya, pues la primera incita a los hombres a la muerte, mientras la segunda los ata a la vida sensible.

Naturaleza y Arte Abstracto:

Los hombres del norte tuvieron una especial predilección por la naturaleza, pero entendida como “bosque”; allí, en la penumbra del follaje o en las fuentes de los ríos habitaban dioses, héroes, doncellas y monstruos. El lugar de culto eran los grandes árboles o los bosquecillos sagrados. En cambio la naturaleza para los griegos (Phycis) era más bien el cielo diáfano del Mediterráneo o los astros que relumbraban en la noche.
El Fresno Universal llamado Iggdrasill se encontraba en el Mittgard. En sus ramas anidaban los dioses y de su follaje se desprendía un constante rocío que mantenía el verdor de los campos:
Dicho fresno es el más colosal
Y el más majestuoso de todos los árboles.
Sus ramas se ciernen sobre todos los mundos
Y llegan por encima de los cielos.
Es el Fresno Iggdrasill,
En él hallarás a los dioses
Dictando sentencias todos los días”

(Snorry)

Las observaciones que cabe consignar son las siguientes:

a. El Fresno Universal parece significar la totalidad y, por tanto, la unidad de los contrarios. Sin embargo llevaba larvada la contradicción. Más adelante en el Renacimiento la naturaleza asumirá dos significados dicotómicos. “Es notable ese sentido vital y casi panteísta con que los pueblos nórdicos conciben a la naturaleza y que contrasta con los sentimientos trágicos que otras veces les sugiere” (Branston).

b. Pese a esa inclinación por lo orgánico y vital, el arte nórdico fue abstracto y esquemático. Es inexplicable que, por una parte, se busque lo biológico y, por la otra, lo geométrico. Una columna gótica de un templo es un árbol pero tan estilizado que ni se lo reconoce.

El Walhalla o Salón de los Muertos:

El Walhalla es el cielo de los hombres nórdicos. Allí van los muertos en combate para entrar en la Batalla Perdurable. Odín, que es el padre de los muertos, los recibe en ese inmenso lugar cuando las Valquirias los traen. Allí los héroes continúan guerreando todos los días, y, de morir, al día siguiente resucitan. De este modo se preparan, junto a Odín, para el Ragnarök, gran batalla en que los dioses han de enfrentarse con las fuerzas del mal.
“La creencia en el Walhalla y en los placeres de una existencia extraterrena hubo de surgir para amparar la vocación guerrera en una continua vida de combates y de prelaciones peligrosas o de aventuras casi inconcebibles sobre navíos como barquichuelos por los helados mares del norte” (Cirot). En el Walhalla los guerreros también juegan, beben y disfrutan.
En cambo los cobardes bajan al Hel y de allí al Niflhel, que se halla en las más remotas profundidades, nueve mundos más abajo (Brandston). Es imposible dejar de ver en esta imagen la influencia remota en los diversos círculos que Dante y Virgilio van descendiendo en el Infierno de la Divina Comedia escrita muchos siglos después.

Y observemos:

a. Los nórdicos no pudieron concebir otro paraíso que el de la perpetua contradicción, cuyo prototipo es la guerra, lo cual contrasta fuertemente con la armonía de las celestes esferas que los griegos admiraban como lo sublime.

b. No es un cielo para todos sino únicamente para los nobles guerreros. La diferencia con la religión cristiana se echa de ver por sí sola en la cual la promesa del cielo está reservada para aquellos que hayan conservado su temeroso corazón de niños.

El Ragnarök:

El Ragnarök o Destrucción de los Poderes Divinos es la creación más terrible del mito nórdico. Al final de los tiempos habrá una sangrienta y helada lucha en la cual las fuerzas de los dioses serán destruidas por los monstruos tectónicos capitaneados por Loki. “El mito del Hel se refiere a un lugar subterráneo, oscuro y misterioso, cárcel de monstruos que se rebelan y alteran el orden establecido y prefigurado por los dioses” (Branston). En alemán Götterdämerung, Crepúsculo de los Dioses.

El sol se oscurece,
La tierra se hunde en el mar;
De sus puestos en el firmamento
Las fúlgidas estrellas se desprenden;
Fuego y húmedo ascienden
A lo alto y chocan
Con ardor caliginoso
Contra el propio dielo.

El sol de los dioses de las batallas
Relampaguea en su espada;
Las cimas de los despeñaderos caen
Cuando los gnomos corren;
Los cadáveres marchan por el camino infernal
Y el cielo se parte.

El hermano con el hermano contiende,
Uno y otro se destrozan;
Hijas e hijos
Se mezclan incestuosamente;
El hombre es el juguete
de una ingente prostitución;
tiempo de hacha y espada,
los escudos se hendirán;
tiempo de viento y de lobo,
antes que el mundo termine.

El mar tempestuoso
Escupe a la faz del cielo,
Penetra en la tierra
Y anega el firmamento,
Del que se desencadenan celliscas
Y crueles vendavales;
Porque así acontecerá
Cuando los poderes estén condenados.

(Del Völuspá)

“La irrupción de los monstruos teutónicos en la región de los dioses provoca la Conflagración” (Cencillo). El Fuego lo devora todo y el mundo se reduce a cenizas; un gran año cósmico ha concluido. Hasta las fuerzas del mal serán calcinadas. Luego se iniciará otro año cósmico que tendrá igual suerte (“Sobre el carácter trágico planea, sin embargo, la misma esperanza que señala la religión más antigua de la India, pues, tras el Ragnarök, con el fin del mundo por el fuego, todo ha de resucitar más puro y renovado” (Cirot). No compartimos esta opinión, pues, el nuevo ciclo que empieza concluirá de igual modo y así eternamente, aunque se admita que cada ciclo es superior al anterior. El mito del Eterno Retorno no deja escapatoria. El Eterno Retorno de los nórdicos (ver Netzsche).

El Ragnarök merece muchos comentarios, pero nos reduciremos a estos:

a. Todo el mito nórdico es pesimista, como el oriental, pues algún parentesco tienen y que les vienen de su origen común. El triunfo del mal es inevitable, la tierra reventará al cielo, la materia asolará al espíritu.

b. Y no podía ser de otro modo, pues aquel Abismo Abierto, origen de todo, al final de los tiempos volverá a tragarse los hombres y los dioses que de él salieron. Poner al hombre antes que a los dioses es invertir el orden de las cosas y ello no puede sino concluir en la destrucción de ambos. Humanismo más materialismo no llevan sino a la negación.

c. El temperamento gótico es así: exaltación primero y desesperación después; primero Hegel, luego Kierkegaard. La influencia de esta actitud hará nublarse en occidente aquel carácter clásico de virtudes con medida y armonía que ponía freno, tanto en la victoria cuanto en la derrota, a griegos y romanos.

d. Y ello es producto de la falta de “logos”, es decir, de la carencia de una visión intelectual de la realidad, reemplazada por el “corazón” liberado a sus propias fuerzas que tanto estalla como se deprime.

Ragnarök y Apocalipsis:

El Apocalipsis es el último libro de la revelación cristiana y que adelanta lo que ocurrirá al final de los tiempos. La interpretación pesimista del Apocalipsis es un canto de esperanza de la nueva vida en nuevos cielos y nueva tierra; es el triunfo del amor de Cristo cuando las naciones sean puestas como alfombras bajo sus pies. Nada hay sobre el poder de la mansedumbre del Cordero, puesto que él es “el que abre y nadie cierra y el que cierra y nadie abre”. La propia iniquidad de los hombres los destruirá en sucesivas plagas cuando los astros se retiren y el cielo se repliegue para dar paso a la luz. Se echa de ver que los sentidos del Ragnarök y del Apocalipsis son polares, inconfundibles.

Supervivencia del Mito:
Numerosos son los órdenes en los cuales podemos encontrar rastros de los antiguos mitos. “Buena parte de los mitos permanece todavía viva, y es capaz de estimular la imaginación y la voluntad del hombre” (Cirot).

1. Se ha señalado que el mito, al perder su fuerza peculiar, ha quedado relegado al mundo de los cuentos infantiles. Caperucita Roja y el Lobo; Blanca Nieves y los Siete Enanitos; Los Viajes de Gulliver (al país de los enanos y al país de los gigantes), tienen sin dudas antecedentes mitológicos. Thor, por ejemplo, es el inspirador de las novelas policiales, de las historietas y películas en las cuales el actor lucha incansablemente contra el mal.

2. En el arte hay referencias expresas al mito como en el caso de Ricardo Wagner y su ópera: “El anillo del Nibelungo”, que concluye con el Götterdämerung. En las películas de Bergman, las referencias son implícitas y suscitadas en un ambiente de misterio e irrealidad; en su temática golpea angustiosamente la pregunta por el sentido de una existencia predestinada al desastre.

3. En Islandia se conserva la costumbre de celebrar una lucha de caballos en honor a Odín. En Suecia se pueden encontrar túmulos y bosquecillos sagrados. No hay dudas de que el Árbol de Navidad desciende del Fresno Universal debidamente bautizado. En algunas catedrales góticas se pueden apreciar bajorrelieves de enanos y dragones.

4. Thor, el gran caballero del mito, también debidamente cristianizado, dará lugar a la épica medieval de caballería; a ese ideal de justicia que impartía el brazo armado del caballero en nombre de su Dios y su dama. ¿Quién no ha leído Gilfrido de Ivanhoe, valiente defensor de una bellísima judía? ¿O esa figura más triste del nobilísimo don Quijote, caballero de la Mancha que se enfrentaba a molinos de viento creyendo que eran gigantes?

5. El Romanticismo medieval que colocó a la mujer tan alto como pudo y que en tiempos modernos la exaltará en demasía llegando a creer que es un ser intermedio entre los hombre y los ángeles es también un rastro de las Valkirias. Y Bécquer que cree en Dios porque ella lo ha mirado.

6. El nazismo intentó revivir ese paganismo nórdico, educando militarmente a su juventud.

7. Dice el mito que Odín es el rey de los Condes y Thor de los Siervos, ¿Cómo no ver en esto un lejanísimo antecedente de las luchas de clase?

8. La famosa oscuridad de los filósofos alemanes no tiene otra explicación que la herencia de aquel espíritu fluente, contradictorio, brumoso de los germanos.

9. Durante el Renacimiento la exaltación de la naturaleza deriva directamente del espíritu gótico. El humanismo moderno que se da conjuntamente estaba ya potenciado en el mito del hombre primordial Ymir. Y, por lo mismo, el materialismo recibió un fuerte impulso de esta tendencia hacia lo tectónico, hacia el Abismo Absoluto.

Resumido de:

- Fernández Sabaté: “Lecciones de Filosofía” Editorial Guadalupe, Tomo II. 1985. Pàgs. 12 a 22.

Aunque no comparta muchos de los conceptos del autor de este estudio, lo publiqué porque no deja de ser una visión original del tema.

El Cantar de los Nibelungos - Fragmentos


Odín y Slaipnir, su caballo de ocho patas; sus cuervos Hugin y Munin, Pensamiento y Memoria, y sus lobos, Geri y Freki.



Dos Fragmentso de
"El Cantar de los Nibelungos"



PRIMERA AVENTURA: Lo que soñaba Kriemhilde.

Muchas cosas maravillosas narran las sagas de tiempos antiguos,
De héroes loables de gran temeridad,
De alegría y de fiestas, de llantos y lamentos.
De la lucha de héroes valientes ahora escucharéis narrar maravillas.

Creció en Burgundia una niña tan noble
Que en todos los países no podría haber alguna más bella.
Kriemhild se llamaba y se hizo mujer muy hermosa.
Por ella muchos caballeros perdieron su vida y su cuerpo.

Amar a la muy noble no traía vergüenza a nadie;
Muchos héroes la pretendieron, nadie la malquería.
Bella sobremanera era la muchacha noble.
Los modales cortesanos de la doncella hubieran sido adorno de todas las mujeres.

Tres reyes la cuidaban, nobles y ricos,
Gunther y Gernot, héroes sin par
Y Geiselher el joven, un espada escogido;
Ella era su hermana, los príncipes tenían que cuidarla.

Ute se llamó su madre, reina de gran riqueza,
Y Dankrat su padre, quien legó la herencia
A favor de sus hijos, cuando murió; antes fue un hombre fuerte
Que en su juventud había ganado muchos honores.

Los señores eran generosos, nacidos de noble estirpe,
Sobremanera temerarios de fuerza los héroes elegidos.
De los Burgundios tenía el país su nombre;
Crearon grandes maravillas aún en el país de Atila.

En Worms a la orilla del Rhin vivían los señores poderosos,
A ellos gustosos servían muchos caballeros orgullosos,
Con grandes honores durante toda su vida,
Hasta que murieron lastimosamente a causa de enemistades entre dos nobles señoras.

Los tres reyes eran, como ya he dicho,
Fuertes y de gran ánimo; eran súbditos de ellos
También los mejores héroes, quienes tenían notable prestigio
De gran fuerza y temeridad, sin miedo en toda lucha.

Éstos eran de Tronje Hagen y el hermano suyo
Dankwart, el rápido, de Metz el señor Ortewein,
Los dos Margraves: Gere y Eckewart,
Volker de Alzei bien dotados de fuerza.

Rumold, el maestro de la cocina; un espada magnífico,
Sindold y Hunold: estos señores debían cuidar
De la corte y de los honores, súbditos de los reyes.
Y todavía tenían muchos espadas; a todos no puedo nombrar.

Dankwart era mariscal; y su sobrino era
Senescal del rey, de Metz, señor Ortewein.
Sindold era escanciador, un espada perfecto,
Y gentilhombre de cámara, Hunold: cuidaban los altos honores.

Del honor de la corte, de su fuerza enorme,
De su dignidad tan alta y de la caballería,
Como los ejercían los señores, con alegría durante toda su vida,
De todo eso realmente nadie puede daros noticia completa.

En su alma virgen, Kriemhild soñaba
Que criaba un halcón fuerte, bello y salvaje;
A éste lo agarraron dos águilas. ¡Lo que ella tuvo que ver!
No pudo sufrir dolor más grande en esta tierra.

Contó el sueño a su madre, la señora Ute,
Que no sabía explicarlo a la bella de otro modo que así:
-“El halcón que tú criaste, es un hombre noble;
que Dios lo guarde, si no, pronto morirá.”

-“¿Qué me dices de un hombre, mi queridísima madre?
Quiero quedarme sin amor de héroe para siempre;
Quiero quedarme tan bella hasta mi muerte,
Para que nunca gane yo penas a causa del amor de un hombre”

-“No lo rechaces del todo” – la madre dijo a ella.
“Si quieres ser feliz en la tierra, con todo tu corazón,
esto vendrá del amor de un hombre: serás una bella esposa,
si Dios te favorece con el cuerpo de un buen caballero”.

-“No habéis así, mi queridísima madre.
La experiencia de muchas mujeres me ha enseñado
Cómo al fin se paga el amor: con sufrimiento;
Quiero evitar ambos: de este modo seguramente me quedaré en paz”.

Kriemhild en su alma quería quedar libre del amor.
De modo que así pasaron todavía muchos días a la buena niña
Sin que conociera a nadie que le hubiera gustado como esposo,
Hasta que, finalmente, con honores, ganó a un héroe valioso.

Y éste era el mismo halcón que había visto en sus sueños,
Que su madre le había presagiado. A causa de su muerte temprana
¡Qué recompensa tan sangrienta dio ella a sus parientes más cercanos!
A causa de la muerte de este hombre murieron los hijos de muchas madres.

SEGUNDA AVENTURA: Siegfried.

En aquel tiempo se criaba en los Países Bajos el hijo de un rey noble,
Siegmund se llamaba su padre y su madre, Siegelind,
En una ciudad rica y fortificada afamada hasta lejanas regiones,
A la orilla del Rhin llamada Canten.

Os diré que este espada, cómo creció con gran belleza.
Siempre estuvo cuidado de toda vergüenza.
El hombre temerario pronto llegó a ser fuerte y de alta fama:
¡Hey, cuán grandes honores ganó en esta tierra!

Siegfied fue llamado el buen espada valiente.
Probaba sus fuerzas con muchos héroes, con valor y ánimo.
Su fuerza o llevaba a muchos países extranjeros:
¡Hey! Cuántos espadas tan hábiles encontró entre los Burgundios.

Antes de que el espada temerario fuera un hombre mayor de eada,
Ya había hecho tantas maravillas con sus manos,
De los cuales uno puede cantar y decir siempre de nuevo;
Mucho tendríamos que callar de él en los días de hoy.

En sus tiempos mejores, en sus días de juventud,
Muchas maravillas se podían narrar de Siegfried.
¡Qué honores florecieron en él y qué bello era su aspecto!
Por eso, con amor, pensaban en él muchas mujeres bellas.

Lo educaron con gran esmero, como era conveniente para él;
Cuánta disciplina y virtud nacieron de su propia alma.
De esto se adornaba el país de su padre,
Que para todas las cosas, lo encontraron tan espléndido.

Ahora estaba tan crecido para cabalgar también a la corte.
Le gustaba verlo a la gente. Muchas mujeres y muchachas bellas
Hubieran querido que él fuese siempre allá.
Muchas lo querían, y de esto se dio cuenta el espada.

Raras veces permitieron que cabalgara el niño sin guardián.
Con preciosos vestidos lo adornaba su madre Siegelind;
También cuidaron de él los sabios conocedores del honor:
Por eso podía ganarse tanto a la gente como al país.

Ahora tenía suficientes fuerzas para cargar armas:
Lo que necesitaba para esto, ellos le dieron bantante.
Ya pensaba en pretender a muchas bellas niñas;
Y a ellas hubiera gustado amar al hermoso Siegfried, con honor.

Entonces su padre, Siegmund, avisó a sus vasallos
Que con buenos amigos quería celebrar un banquete en la corte.
Y llevaban las nuevas al país de otros reyes.
A los del país y a los visitantes regaló caballos y vestidos.

A quiénes encontraban, según la tradición de sus padres,
Debían hacerse caballeros; tanto nobles escuderos como jóvenes.
Los invitaban al país para la gran fiesta,
Donde les ciñeron la espada al mismo tiempo que a Siegfried.

Se podrían narrar maravillas de este banquete en la corte.
Siegmund y Siegelind ganaron en este día
Muchos honores por los regalos que dieron con su propia mano:
Por eso se vio a muchos extranjeros, cabalgando hacia su país.

Cuatrocientos jóvenes espadas debían ser vestidos
Junto con el joven príncipe. Muchas muchachas bellas
Se vieron ocupadísimas en la obra: a él querían todas,
Muchas piedras preciosas fijaron las mujeres en el oro.

Las cuales querían coser con galones en los vestidos
De los jóvenes héroes orgullosos. Así era la costumbre.
El anfitrión mandó construir tribunas para muchos hombres valientes,
Para este solsticio, cuando Siegfried ganó el rango de caballero.

Entonces fueron a una catedral muchos ricos vasallos
Y muchos caballeros nobles. Los ancianos hicieron bien
Sirviendo a los jóvenes, como se les había hecho a ellos.
Se divirtieron con eso y se alegraron al verlo.

Entonces, cuando cantaron una misa en honor de Dios
Hubo entre la gente una gran aglomeración,
Cuando se ciñeron la espada de caballeros, de acuerdo con el uso caballeresco,
Con tan altos honores no será fácil que vuelva a acontecer.

Se apresuran a encontrar muchos caballos bien enjaezados
Y en la corte de Siegmund se levantó el ruido de torneos
Tan fuerte, que tronaban el palacio yla sala.
Los espadas valientes empezaban un alboroto alegre.

De ancianos y de jóvenes sonaron muchas lanzadas
De modo que el quebrar de las astas sonó en los aires,
Las astillas se vieron volar hasta arriba por la sala.
La diversión miraban las mujeres y los hombres.

El anfitrión pidió que terminasen. Se llevaron los caballos;
También vieron quebrados muchos escudos fuertes allá.
Y también muchas piedras preciosas tiradas en la pradera
De las hebillas del bello escudo: rotas por los golpes.

Entonces sentábanse los invitados, adónde se les designó,
En la mesa, donde mucha comida rica los refrescaba,
Y el mejor vino que les sirvieron en abundancia.
A los paisanos y a los extranjeros se ofrecieron muchos honores.

A pesar de haber ejecutado sus artes durante el día
Los juglares y vagabundos no querían descansar;
Servían por donativos que abundantemente encontraron;
Con eso ganó alabanza todo el país del rey Siegmund.

Entonces el rey mandó que a Siegfried el hoven
Se le entregase en vasallaje el país y las fortalezas como él los había recibido antes.
Y dio a sus compañeros de espada con mano generosa:
De modo que estaban contentos del viaje que los había traído al país.

El banquete de corte duraba hasta el séptimo día.
Sieglind, la rica, cuidaba de la costumbre antigua,
Repartiendo oro rojo por amor a su hijo,
Bien ella podía ganar para él con esto el favor de toda la gente.

Al final ya no hubo juglar pobre en todo el país.
Los vestidos y caballos les volaron de las manos
Como si ya no tuvieran que vivir más que un día.
Jamás se vio a gente que obrara con tanta generosidad.

Con honores loables terminaba la diversión.
Y desde este tiempo podía escucharse de los vasallos
Que les gustaría ser súbditos del joven.
Esto no lo pedía Siegfried, el espada noble.

Mientras vivieran todavía Siegmund y Siegelind,
No quería él llevar la corona, el hijo querido por ambos.
Pero quería rechazar magníficamente todo ataque,
Que se temiera a sus países, el espada temerario y bello.

Nadie podía censurarlo. Desde que había recibido las armas,
Raras veces descansó el héroe ilustre.
Sólo trataba de luchar, y su mano fuerte
En todo el tiempo le ganó fama en países extranjeros.


Fragmentos extraídos de:
"El Cantar de los Nibelungos". Traducción al español de Marianne Oreste de Bopp. Editorial Porrúa, Colección "Sepan Cuantos", N° 285





Fragmentos de la película de Fritz Lang "Los Nibelungos" (1924)

 

Con esta melodía se acompañaba y cantaba el Cantar el los Nibelungos

(Melodía extraída del sitio: BIBLIOTHECA AUGUSTANA:

He aquí el libro completo. Está en formato PDF. La traducción es muy buena.


I.F.D. Borges

I.F.D. Borges
En la Escuela Normal funciona el Borges